El Cabernet Franc por sí solo resulta en vinos muy elegantes que nos encantan. Este vino en boca es jugoso y tiene sabores muy refinados. Los aromas van más a la fruta roja como la cereza y la frambuesa, aunque también encontramos notas mentoladas y algo de pimienta.
Joanna Foster y su esposo Ernesto Catena comenzaron a cultivar de manera biodinámica en 2002 cuando plantaron su viñedo en la subregión Vista Flores de Tunuyán en el Valle de Uco en Argentina. Quince años después, nació Stella Crinita. La familia de Joanna es de Malasia, India y Reino Unido. Fue criada por su madre, quien la vida como activista la llevó a Grecia y el sur de Asia. La familia de Ernesto Catena es una familia vitivinícola multigeneracional que está bien arraigada en Argentina. La pareja se conoció en 1995 cuando el trabajo social y ambiental de Joanna la trajo a Argentina. Se casaron en 2004 y ahora tienen tres hijos. Juntos se interesaron por la elaboración del vino natural a principios de la década de 2010, lo que finalmente se convirtió en una pasión para la pareja. El viñedo ha sido certificado por Demeter como biodinámico desde 2012 y la producción sigue siendo extremadamente pequeña.
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